LA VIDA DE CADA HOMBRE ES UN CAMINO HACIA SI MISMO. EL ENSAYO DE UN CAMINO, EL BOCETO DE UN SENDERO

jueves, 10 de febrero de 2011

Tapia: Esencia Marina en el Camino de Santiago

Llegamos al final de la primera etapa a poco mas de las 12 del mediodia encontrandonos delante de nuestro 2º albergue. En esta ocasión, el albergue tenía muy buena pinta al exterior, simulaba a una iglesia con algunas pinceladas barroquianas pero muy pequeñita, lo que la hacia mas acogedora en principio. La verdad que era bastante curiosa, la fachada se componia de un gran portalon de madera acompañada a ambos lados por sendas aberturas acabadas todas ellas en arco ojival , un ojo de buey en la parte media-alta de la fachada y cuyo tejado cerraba la misma a dos aguas.




Encontramos la puerta abierta justo en el momento en el que salian dos ciclistas dispuestos a poner inicio a la ruta que les tocaba..."Pedalear no se si pedalearian mucho, pero dormir seguro que durmieron" xD.
Al entrar encontramos un "yermo" particular del albergue, estaba bastante sucio, la planta baja se componia de 3 literas distribuidas de distinta forma, al fondo las escaleras que subian a la primera planta y a los pies de la escalera se encontraban los baños a izquierda y derecha. En el fondo a la derecha de la planta baja habia una mesa con un monton de restos tanto de comida como para hacer de comer y algo más de basura y un microondas en el cual brotaba un particular "ecosistema" microscopico, es decir, estaba muy sucio.

En cuanto a la primera impresion que nos dieron las camas, he de decir que mas o menos es lo que me imaginaba que me hiba a encontrar antes de salir de Sevilla, pero tan diferente de lo que nos encontramos en el albergue de La Caridad, que empezo a darnos un poco de asco el lugar, poco que se vio sumamente multiplicado al hacer la primera visita a los baños, no habia por dónde coger esos baños si así se les podía llamar (Como podran imaginar, he preferido hacer omisión de detalles).
Asi que subimos a ocupar sitio en la primera planta huyendo de la anterior, y encontramos una pareja extranjera durmiendo, que poco después supimos que el chico padecia de la rodilla, seguramente fruto del duro Camino.

Una vez situados y asentados nos dispusimos a aventurar en la dura selva que no tropical, que no sudamericana ni africana sino de una que estaba mucho mas cerca y peligrosa llamado...BAÑO!!!! Para poder asi darnos un aseo y librarnos del sudor y el polvo que traiamos impregnado de nuestra primera etapa de este Camino de Santiago.