LA VIDA DE CADA HOMBRE ES UN CAMINO HACIA SI MISMO. EL ENSAYO DE UN CAMINO, EL BOCETO DE UN SENDERO

viernes, 1 de octubre de 2010

El Camino tiene fecha

Dia 2 de Agosto de 2010...

Dia clave, dia cumbre, dia de Días...Por fin llegó ese día que tanto habíamos esperado, unos más como Ana, que habia esperado este día durante 7 años (Desde su último Camino de Santiago), y otros menos como Bibiana y yo.
Ana fué la principal culpable de habernos metido en la cabeza eso que llaman..."Camino de Santiago" cuando me dijo un dia que queria hacer el Camino de Santiago. ¿Qué era eso del Camino? Por supuesto sabía de su existencia, claro, pero...¿Que podria esconder, pensaba yo, El Camino para que ella 7 años después tuviera esa ansia de volver? Eso me preguntaba sin saber que un dia llegaría a encontrar la respuesta.

La fecha se propuso aproximadamente 1 año antes cuando dijimos de irnos en la epoca estival de 2010 aprovechando el Año Santo(Xacobeo), pero la fecha concreta se propuso unos meses antes del verano cuando, a partir de aqui, comenzaría una cuenta atrás donde el ansia de saber ¿Qué era eso del Camino? entraria a formar parte de mi.



Esa tarde nos esperaba el autobus rumbo a Oviedo a eso de las 18:00, donde tras hacer estacion habria que coger otro bus hacia la que sería nuestra primera etapa, La Caridad. Una aldea pequeñita pero con un encanto enorme (La Caridad).

El trayecto en bus no se me hizo excesivamente largo, si no fuera por los sustos que te pegaba el conductor cuando nos disponiamos a parar el viaje hubiese sido un poco mas ameno, mas que nada porque iriamos durmiendo xD. Aun asi paramos muchas veces, unas en estaciones para bajar y recoger gente y otras para descansar y estirar las piernas. Personalmente me quedaba pasmado con un reloj digital que daba la hora y la temperatura, y me fijaba conforme nos adentrabamos mas al norte mas frio hacia.
Durante las mayorias de las paradas, mas concretamente aquellas que van desde Sevilla hasta Valladolid,  hacia incluso calor, pero en la parada que realizamos pasada dicha comarca notamos un intenso frio de cerca de 10 grados, hecho que nos hacia indicar que cada vez estabamos mas cerca de nuestro destino. ¡Dios que ganas de llegar!



El frio me cogió desprevenido, acostumbrado  a todas las paradas anteriores, ¿Quien me hiba a decir que tanto frio pudiese hacer incluso en Agosto? Pues para remediarlo, no me pense ni siquiera dos veces la ellecion de tomar un cafe muy muy caliente, al que agradecí muchisimo, ya que paradojicamente sirvió para hechar el último sueñecito antes de encontrarme a las puertas de la bellísima Asturias.